Los resultados obtenidos con garra y coraje por la delegación peruana en los XI Juegos Sudamericanos Cochabamba 2018 ha generado una muy grata sensación y optimismo por la próxima participación nacional en los Juegos Panamericanos Lima 2019. 

Una de las formas cómo se manifiesta esta alegría es cuando los entusiastas analizan comparativamente los resultados de Cochabamba 2018 donde la delegación peruana obtuvo 22 medallas de oro, 29 plata, 41 de bronce, haciendo un total 92, versus los resultados menos números en medallas de Santiago 2014 (9 oro, 13 plata, 18 bronce, total 40) y Medellín 2010 (19 oro, 18 plata, 33 bronce, total 70).

Definitivamente el deporte peruano está avanzando desde hace siete años y este desarrollo se evidencia con las 92 medallas de Cochabamba 2018. Pero para tener una mejor visión de este avance vamos a comparar el logro nacional en atletismo de Cochabamba 2018 con los resultados del Campeonato Nacional Universitario 2018 de Estados Unidos (NCAA DIVISION I TRACK AND FIELD CHAMPIONSHIP) que se llevó a cabo del 6 al 9 de junio, casi en paralelo con los Juegos Sudamericanos Cochabamba 2018.

Los tiempos que hicieron los medallistas de oro Inés Melchor, Saida Meneses, Rina Cjuro y Yuri Labra los hubieran ubicado más rezagados que los últimos puestos del Campeonato Nacional Universitario Estados Unidos 2018. Además es probable que con estas marcas que obtuvieron estos atletas nacionales ellos no hubieran logrado clasificar a la etapa nacional del máximo evento deportivo universitario norteamericano.

El caso de la atleta Paola Mautino es distinto. Con la marca 6.66m en salto largo que le mereció la medalla de oro en Cochabamba 2018 ella hubiera obtenido la medalla de plata en el Campeonato Nacional Universitario de Estados Unidos 2018. Es importan resaltar que con este resultado Paola Mautino batió el récord nacional y sudamericano de esta prueba y esto nos acerca a conocer el nivel competitivo del deporte universitario de Estados Unidos.

Otro logro importante de Paola Mautino en estos Juegos Sudamericanos Cochabamba 2018 fue batir el récord nacional en los 100 metros planos con un tiempo de 11.76 segundos, dos centésimas menos que lo tenía Carmela Bolívar, desde 1978. Para saber que significa este record batido en el deporte universitario norteamericano lo trasladaremos al ránking nacional 2018 que elabora www. directathletics.com. Los 11.76 segundos logrado por la atleta nacional corresponde al puesto 216 de este ránking.

La marca de 100 metros planos de Carmela Bolívar de 11:78 segundos fue récord nacional por 40 años. Es probable que este lapso de tiempo sea un indicador de la brecha que tenemos que acortar para lograr la añorada medalla olímpica. En esta labor de acortar la brecha tenemos que tomar en cuenta el deporte universitario peruano. Estados Unidos tiene un sistema deportivo universitario cuyos resultados son superiores a los Juegos Sudamericanos y por ende al deporte nacional. Para graficar esta superioridad en la parte nacional en el siguiente cuadro se trasladó los tiempos de nuestras medallistas de plata de atletismo de Cochabamba 2018 al ránking referido líneas atrás.

Como se puede notar el resultado de este traslado es impactante. Dos de las medallistas de plata no logran siquiera entrar al Top 250 de este Ránking. El tiempo que hizo Gladys Tejeda Corresponde al puesto 242. Los 13.36 segundos de Diana Bazalar que significó un nuevo el récord nacional corresponde al puesto 55. Algo alentador es la marca de la atleta Segura que le mereció la medalla de plata y la ubica en el puesto nueve del ránking.

Las universidades no son las tumbas o cementerios de los deportistas competitivos, pueden ser un espacio donde se consolide el deporte peruano el cual desde hace varias décadas sobrevive y obtiene logros gracias a la fuerza y coraje de los atletas y el apoyo de sus familias. Cuanta falta hace un verdadero Sistema Deportivo Nacional y solo queda pedir a los dirigentes deportivos no pierdan la visión estratégica que necesita el desarrollo del deporte peruano. 

*Nota del editor: Karlos Tacuri es antropólogo y Diego Moreno es administrador. Los autores no son responsables del título ni de la bajada del presente artículo.